Los clústeres y las redes empresariales son espacios de encuentro, entre empresas e instituciones que experimentan un cierto grado de cercanía geográfica y/o sectorial. Esta cercanía puede ser útil para mejorar su desempeño. Para que esto ocurra, deben avanzar hacia el desarrollo de agendas estratégicas compartidas, lo cual requiere que se intensifique la interacción y se profundice la confianza recíproca. La acción mancomunada estimula su capacidad de innovación y facilita el logro de economías de escala, contribuyendo así a mejorar su desempeño.